Patricia Peyró @kontrolparental

Todos hemos oído en las noticias esas historias tremendas de adolescentes que arremeten a tiros contra sus compañeros en el instituto. Nos suenan muy lejanas y en general creemos que sólo ocurren en Estados Unidos, donde se puede adquirir un arma de forma legal, pero la realidad es que podrían tener lugar en cualquier sitio en el que un joven se hiciera con un arma, algo no tan complicado con la existencia de internet o, simplemente, si algún miembro conocido suyo fuera aficionado a la caza.

Las armas las carga el diablo, pero los portadores de estas podrían ser jóvenes de cualquier nacionalidad y que estuvieran “madurando” la idea con antelación, como consecuencia de un trauma respecto a sus compañeros por el que buscaran venganza, o por alguna enfermedad mental, como la depresión, la falta de habilidades sociales o la sociopatía.

El vídeo transcurre en un escenario de lo más “happy” y en el que la normalidad da lugar a un pequeño romance entre jóvenes, que capta toda nuestra atención. Sin embargo, a la par que se gesta el amor entre dos estudiantes, otro de ellos planifica un atentado con armas contra sus compañeros, hecho que nos pasa desapercibido, eclipsados por la adorable historia de amor adolescente.

Detrás de este vídeo se encuentra Sandy Hook Promise, una organización sin ánimo de lucro creada a partir de la Masacre de la Escuela Primaria de Sandy Hook: En el año 2012 murieron al menos 26 personas, 18 de ellas niños, a manos de un asesino de 20 años llamado Adam Lanza y cuyas motivaciones todavía se desconocen a fecha de hoy.

La directora de esta fundación, Nicole Hockley, madre de una de las víctimas del atentado de Sandy Hook, ha querido lanzar algunos mensajes: “Quiero que la gente sepa que la violencia con armas es prevenible si conoces las señales”. Con esta campaña pretenden abrir los ojos ante la violencia antes de que suceda. “Pensamos en el peligro inminente. Se trata de prevenir”, ha declarado.

Otros casos sonados:

La masacre de la escuela secundaria de Columbine (Colorado) en 1999 se cobró la vida de 15 personas y otras 24 resultaron heridas, en lo que se consideró una de las peores masacres en una escuela americana. La historia fue contada después a través del cine en la película de nacionalidad estona “Klass” (La clase) Un filme del 2007 de nacionalidad estona y que representa de forma magistral el cine de bullying, comenzando por la figura del niño acosado que se siente aislado y sufre hasta que se le abre una ventana hacia la esperanza al hacer amistad con otro niño con el que termina urdiendo un plan de venganza.

Crónica de una matanza anunciada en la Universidad Politécnica de Virginia

En este caso, también en Estados Unidos, donde el acceso a las armas es legal, ChoSeung-Hui mató a 32 estudiantes suicidándose después, tras haber advertido de sus intenciones a través de un vídeo, en el que manifestaba sentirse acorralado y que los acontecimientos podrían haberse evitado.

Matanzas en Alemania

Alemania ha protagonizado varias matanzas: una en el año 2002, en la que un chico de 19 años mataba a un total de 16 personas, entre alumnos y personal del centro; la segunda tuvo lugar en la localidad de Winneden en el 2009 y en ella fallecieron 17 personas.

Atentado en la isla de Utoya (Noruega)

Más reciente fue el caso de Breivik (año 2011), el asesino neonazi que mató a 77 personas en diferentes puntos de Oslo y Utoya. Su motivación en estos casos no fue el haber padecido acoso escolar, sino unas ideas políticas radicales y racistas que le hacían verse a sí mismo como un “salvador”.